Autocuidado integral
Aunque este don incluye el cuerpo (que es finito y relativo), lo he puesto entre los dones espirituales porque es la base de la mente, así como la mente es el trampolín hacia el Ser. Un cuerpo sano te permitirá poder ir a lo más profundo de ti mismo y, cuidándolo, te permitirá vivir más años dándote más tiempo para lograr la Felicidad Suprema.
¡Abre tu corazón! Rodéate de buena compañía [Satsaunga]
Si puedes evitarlo, no te rodees de personas solas y negativas.
Abre tu mente y sentidos. A tu alrededor hay muchos que pueden ayudarte o acompañarte. Busca personas libres, sencillas, alegres y con una filosofía de vida positiva y sutil. Porque te has encerrado en ti mismo, y no te permites ver, escuchar o aún sentir ese soporte. Hay muchas personas generosas con vocación de servicio que pueden ofrecerte una amorosa ayuda.
Empieza a ver a esas personas, escúchalas, si logras tener un mentor, escúchalo, lee libros espirituales, medita, sirve.
Con ellas, siéntete libre de compartir lo que te agobia y hace sufrir. Tal vez alguien de ellos ha pasado y superado algo similar y te puede ayudar. Si no saben, sabrán escucharte desde el Amor, y ayudarte.
Perdónate y perdona
Lee este artículo sobre el perdón.
Busca una mentoría benevolente
Busca ayuda benevolente de alguien en quien confías y que te pueda apoyar con sinceridad y amor, dar esperanza y enseñar a cómo tener paz y felicidad.
Crea y refúgiate en tu ermita exterior
Si, aun viviendo con otros, sientes la necesidad de estar solo y por un tiempo elegir la soledad creativa o sutil, es importante que tengas un espacio todo tuyo donde recargarte, pensar, estar con tu esencia y conectarte con el Ser. Será un espacio agradable que vibra contigo, donde sientes serenidad, y donde te sientes bien y en armonía contigo mismo y con tu alrededor.
Allí podrás leer, escribir, escuchar música, reflexionar profundamente, hacer tus prácticas espirituales de meditación, contemplación y silencio, y conectarte con Dios para sentir Su Amor y Paz.
Tu ermita exterior será como regresar a ‘casa’, y donde nadie pueda interrumpir el flujo de tus pensamientos. Y pensamientos tendrás. Al inicio locos, tal vez desesperados y dañinos, que te harán llorar y desahogar de todo lo tóxico que el mundo te ha dado. Pero, pronto te calmarás y podrás ver a través de esa cortina oscura y maloliente. Y entonces, estando en el presente, podrás enfocarte en lo más bonito de tu existencia o, si eres un espiritualista, te centrarás en el Ser y en el Ser Supremo.
Para tener tu propia ermita, no necesitas mucho. Lo ideal sería tener una habitación toda tuya. Si no tienes esa posibilidad, puede ser una esquina de tu habitación, o un espacio tranquilo de tu casa donde pondrás una mesita con un pequeño tapete al frente donde sentarte, relajarte, conectarte contigo mismo, y además meditar. Si quieres, puedes decorar ese espacio con objetos que son significativos para ti o que simbolizan parte de tu camino hacia la Felicidad. Ese lugar pronto se cargará de tu vibración sutil que te ayudará siempre más a concentrar tu mente.
¿Y si no tienes posibilidad de tenerlo en casa? Búscalo afuera, ideal en la naturaleza. Puede ser una esquina de un parque, la cima de un morro, una playa que te gusta, la orilla de un río o de un lago, una roca donde te puedes subir o aún acostar abrazado al solecito. Si aún eso no es posible, búscalo en una antigua, silenciosa y solitaria biblioteca. Verás, cuando sabes qué buscar, encontrarás muchos lugares a tu alrededor que nunca habías notado antes.
Pero, si no tienes el hábito de la soledad, tal vez pensarás: ‘¿Es correcto aislarme y dedicar un tiempo a mí mismo, excluyéndolo de quien me pueda necesitar?’ Si te sientes responsable con tu familia o hay exigencias externas que sientes debes acudir, tu buen corazón te dirá que estás robándote ese tiempo para ti. Lindo que pienses así, sin embargo, considera ese tiempo y espacio dedicado a ti mismo solo como una separación temporal, y no un aislamiento de quien amas; míralo como una oportunidad para regresar a tu interior, a Dios, evolucionar mental y espiritualmente para así, desde el amor, hacer planes que luego pondrás en acción sirviendo siempre más y mejor a quién te necesita.
¿Dónde Vivir? ¿Campo, o Ciudad? ¿Casa o edificio? Desde un punto de vista energético, estar demasiado cerca de personas que no tienen una onda mental similar a la tuya, te consume energía. Por ejemplo, además de deberte aguantar el chateo en alto volumen de la TV del vecino en la otra parte de las paredes, porque está a pocos centímetros de tu cama, estás absorbiendo las ondas eléctricas de esa TV.
Si puedes y te gusta, aprovecha vivir en una casa separada pero no aislada. Si prefieres y estás listo a vivir en el campo serás aún más libre de tener una soledad relativa para cargarte siempre más, y así luego dar a quien sufre.
Fortalece tu ermita interior [el Ser]
El lugar secreto en mí, mi oasis de paz y tranquilidad, mi Ser.
Búscalo, y porque está ya en ti, lo encontrarás. Es tu lugar sagrado y seguro donde nadie puede entrar y es donde puedes quedarte cuando quieras y todo el tiempo que quieras. Es el lugar donde ir cuando quieres escapar del mundo frívolo y trivial que te rodea.
Busca el silencio interior
Apaga los ruidos de tu mente y busca el silencio interno.
Una práctica espiritual se llama maonobrata, o silencio mental con contemplación del Ser Supremo, por treinta minutos al día. Cierto, en un mundo ocupado, y además habituado a hablar y escuchar, eso parece mucho.
Ahora bien, ¿Es posible escuchar a alguien cuando estás concentrado en hablar o absorto en otra cosa? No. Es muy difícil. ¿Alguna vez escuchaste a Dios? Si quieres, siéntate, cierra los ojos, calma el flujo de pensamientos que no te permiten de escuchar Su voz, canalízalos hacia Él, y sentirás Su presencia. Deja que Él te visite y hable. Simplemente le dices: ‘Aquí estoy’ y solo espera que Él te responda. Si eso sucede, saltarás como un niño feliz, lleno de dicha, y estarás tan feliz que quisieras salir de tu piel y no sabrás cómo expresarlo.
Si no estás listo para escucharlo, ve más, más y más en el profundo de ti mismo, habla con Él, y encontrarás alegría.
Recuerda que nada se mueve sin Él. Él es quien te da esta tremenda energía (shakti) y felicidad que llena tu corazón. Él es el único que dirige el espectáculo. Consíguelo, y obtendrás todo. No olvides este simple pero gran secreto. Mi Maestro muchas veces dijo “Adelante, adelante” y nos invitó a fundirnos en Dios, a volvernos Él. Si ya has aprendido tu mantra (personal o universal) hazlo con total ideación y con el corazón lleno de Amor por Él, y un día, eventualmente, te fundirás y te volverás Él.
Despierta, conócete a ti mismo y descubre quién realmente eres [Samvit]
Encontrarte a ti mismo representa la búsqueda del Ser quién, en la grandísima mayoría de las veces, es suprimido por la mente y no puede expresarse. ¿Por qué, aunque inconscientemente, la gente busca la soledad? Porque, privándola del ruido del mundo y de las muchas ocupaciones que la llenan, necesita tranquilizar la mente para que el Ser suba a la superficie y así sentir Su presencia. Esa experiencia y revelación es algo asombroso, que, dejando la mente en paz por un tiempo, te hace sentir que tú eres mucho más que tu cuerpo, mente o emociones. Y eso lo logras solo en la soledad de tu interior, que no significa retirarte o aislarte completamente del mundo que te rodea.
Hoy en día, muchos no conocen o se han olvidado de los beneficios de la soledad, y así la mayoría de las actividades se hacen en grupo. Sin embargo, si a ratos puedes dejar la rutina diaria para entrar en tu mundo interior, lograrás pensar profundamente, tendrás una mejor auto-comprensión, te sentirás mucho más independiente emocionalmente, y no permitirá a nadie ralentizar tu proceso interno. Entonces, en esa ermita interna, serás libre de soltar tus pensamientos negativos o confundidos y transformarlos en positivos y productivos, para así actuar en tu consciencia, principios morales y para entender el profundo significado de tu existencia.
Vida sencilla, contentamiento [Aparigraha]
En un mundo lleno de colores y atracciones, andas rodeado por una sociedad que alaba y venera un estilo de vida lleno de pompa y espectáculo, un estilo de vida basado en el ego dominado por nombre, dinero y poder. En ese mundo, el éxito está medido por un sistema de valores vacíos y pervertidos tal como la ostentación, la exhibición vulgar de riqueza y posesiones que vienen admiradas y codiciadas.
La enorme mayoría de seres humanos vive en la ilusión de que tener más y siempre más es la meta de la vida, donde estatus social, codicia y egoísmo son valores de admirar y adquirir.
Los nuevos dioses —ego, sexo, entretenimiento, fama, dinero y poder— y sus profetas, son alabados, copiados y admirados por la masa dormida.
Pero, ¿Puede un ciego guiar a otros ciegos?
Si quieres lo mejor para ti, y si quieres emular a los verdaderos grandes entre los humanos y lograr la Felicidad, lleva una vida simple, sin ostentación. No te dejes impresionar por los demás, porque eso va a llevarte a la perdición.
Evita tener una vida lujosa, caprichosa y llena de desperdicios. Tu cuerpo es solo un empaque y así no necesita de ropa costosa, perfumes o esencias estimulantes que solo te alejarán de tu Ser, porque te acercarán mucho al mundo y menos a quién realmente eres.
El mejor antídoto a la soledad [Seva, Tapah]
¿A veces preguntas a Dios el por qué hay tanto sufrimiento o cómo puede Él ser tan cruel para permitirlo? Pasa. Pero, ¿Te has también preguntado que, tal vez, Él ya actuó creándote y mandándote allá para resolver ese sufrimiento?
La soledad es una gran maestra y, aún aislado de los demás, te regala lo que muchos centrados en ellos mismos, no saben que existe: la empatía. Tal vez porque lo viviste en carne propia, sientes más por el sufrimiento ajeno, por la injusticia social, por la explotación, por la destrucción del medio ambiente, por la locura colectiva que se ha empoderado de la sociedad. A veces lloras mirando a las noticias, ver los rostros de sufrimiento de los desplazados por la violencia, una madre que perdió su hijo, los ojos todavía llenos de miedo de quien fue abusado, el dolor social que toca cada fibra del mundo. Pero, aunque llorar puede ser la primera reacción, ¿Qué hacer después? ¿Cómo contribuir a aliviar ese sufrimiento?
Sé SU instrumento y nunca más estarás solo. Hay millones que te están esperando. Sirve a quien sufre. Hazte voluntario por una causa que está cerca a tu corazón. Adicional a todos los beneficios del servicio, tendrás un sentido positivo en tu vida. Pronto entenderás que tus sufrimientos son menores que los de los demás y así sentirás gratitud. Además, sirviendo, encontrarás personas similares a ti que llenarán parte de tu soledad.
¿Qué tipos de servicio podrías hacer?
Hay muchas maneras de servir, algunas buenas, otras ideales. Aun así, el servicio más poderoso es hacer que la consciencia colectiva se eleve, o si no, la gente nunca entenderá o cambiará.
Puedes empezar haciendo actos amables para desconocidos. Vete a cazar la oportunidad de ayudar a alguien, puede ser un acto pequeño que genera un gracias y una sonrisa. Habla con desconocidos que el destino te pone al frente. Quién sabe, esa persona puede volverse tu mejor amigo y la solución a tu soledad.
Medita [Sadhana]
Aprende a meditar y medita. Haz el curso gratuito que encontrarás en este sitio.
Sin pensar en lo mucho que tienes que hacer, esfuérzate a meditar sin distraerte o detenerte y verás. Encontrarás paz en tu corazón, estarás más con Él, y sentirás su amorosa presencia. Ese es el servicio que El Ser Supremo más ama.
Vuélvete un devoto [Bhakti]
¿Te has alejado de Dios? Ahora es el momento de acercarte, de sentirlo en ti, necesitarlo, crear una relación estrecha con Él y entregarte a Él.
La devoción es la puerta maestra para llegar a Dios. Enamórate de Él, Entrégale tu confianza y recibirás Su Gracia. ¿Creo solo en Dios, o creo a Dios y todo lo que Él mismo ha dicho y asegurado en el Conocimiento Transcendental de El Camino para llegar a Él?
Si te entregas a Dios, tendrás Su poder y Amor. Pero, ¿Te estás realmente entregando?
Lee libros espirituales [Svadhyaya]
Leer y entender temas espirituales y buenos libros, música, arte, belleza y cultura. Búscalos y los encontrarás.
Lo que acabas de leer es solo una pequeña parte de qué es la soledad. En la página principal dedicada a este tema podrás comprender mejor cómo entenderla y vencerla, y a su vez cómo usarla a tu favor y disfrutarla.
Lee el próximo artículo de esta serie: 4.7. La Solución Permanente a la Soledad
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