Hija única y princesa de su familia. Laura ha sido una chica muy afortunada que ha tenido todas las oportunidades.

Amante de los animales, y convencida de que los humanos debemos ser la voz de ellos, decidió ser vegetariana.

Bailarina de corazón e ingeniera biomédica de profesión, desde muy pequeña sintió atracción hacia el mundo espiritual. El año pasado, aunque ”pareciera” que no lo estaba buscando, llegó a entender el objetivo de PanaceAM, y supo que eso era lo que había siempre buscado.

En su primer retiro con Dada y Didi entendió que vinimos a este mundo para ser felices y allí también resolvió su dilema: seguir su corazón y volver realidad su sueño de siempre, ser una bailarina de profesión. Y, con coraje y determinación, dejó entonces su reino y se trasladó a Bogotá, donde actualmente está viviendo y bailando feliz.

Siempre agradecida con la vida y las grandes experiencias que le han llegado, sabe que ahora es el momento de regresar al mundo toda la alegría, felicidad y paz interior que, día a día, PanaceAM le brinda.
Gracias al Movimiento Mujer Despierta entendió el significado de ser mujer y amar su cuerpo, aceptando su naturaleza y los cambios que eso conlleva, lo que le dio independencia y seguridad en sí misma.
Ahora, ya empoderada, quiere inspirar y ayudar a las mujeres que todavía deben “despertar” y generar el cambio que las pueda transformar en dignas e importantes miembros de una sociedad justa y armoniosa.